Epifanía

enero 6, 2009

Amaneció y no vi las estrellas. Mis ojos se habían; se han eclipsado en un tormento, en un torbellino de cristal labrado. Mi mente divaga entre dolor, desesperación y rencor. No hay nada más por aquí, ya lo he dicho. Las constelaciones para mí se han apagado, como cuando apago la luz de una vela con un suspiro y  para así quedar en la oscuridad.

No sé si este día habrá magia, no lo sé; no sé si la encontraré como encontré a una mano quemada, a la mano de una mujer joven que perteneció a una niña, a una que he querido buscar para en estos tiempos encontrarla y que me diera sus cuentos, sus dibujos y su felicidad; pero… no sé si en realidad me atreva a buscar o a la niña perdida; quizás ya la haya encontrado sólo que no me ha dado respuesta alguna desde hace mucho, en realidad no lo sé. Esa niña perdida que es viva imagen de una vida, de una risa, de una tristeza escondida en forma de un fantasma blanco. Aquella que se quedó en el incendio de un viejo castillo, cuando las escaleras se iban deshaciendo y caían a pedazos, y ella subía con una suma desesperación escapando de la muerte y así sin saberlo iba hacía un mismo vacío, en el que quedó triste y desconsolada.

Hoy por hoy ya no me importan los regalos, creo que la vida ya no existe en mi. Y sin embargo siento que me confundo con el presente y los recuerdos, con las letras y  los laberintos.

Una fuga en una espiral, en un juego de cartas que no dice nada ya. Fichas de colores, que grises se vuelven ante mi mirar.Recuerdos de aquellos juegos que en una infancia, ya no, quiero, ni pensar, ni recordar.

Me duele profundamente, el percatarme de que no vi las estrellas, me duele pensar que esa pequeña ilusión que quedaba en mi alma se ha ido, o me duele pensar que la he perdido, aunque la quisiera tener. Año con año siempre salía a ver las constelaciones y pensaba no en los regalos, no en una religión, sino en la magia de la inocencia, de la que se sigue teniendo. La inocencia que se mezcla con maldad y coraje, con venganza y odios, con lágrimas y frío desolado.

La inocencia de la que se han burlado muchos, de la que al paso del tiempo se ha mezclado con sentimientos que son su total contraste.

Este día quisiera tener conmigo a esa niña, quisiera sonreír, quisiera despertar y dirigirme a una chimenea, junto al reloj holandés de aquel salón, sentarme en el frío piso de mármol y sentir por una pequeña ventanita las ráfagas de aire helado que recorren mi rostro, mientras juego con palabras, con cartas, con libros y con música.

Tal vez nunca encuentre a esa niña, y nunca tenga esta oportunidad de nuevo. Ahora duermo cuando sale el sol, en medio de una profunda tristeza y el único consuelo que me queda es creer que alguna vez pueda compartir todo esto que plasmo y siento con otra niña, con una dulzura, con un pedacito dónde vea mi esencia, que juegue cartas y a la que le lea cuentos sobre lobos, como hacían conmigo cuando iba a dormir…

Quizás este es el tiempo de darme cuenta que nunca voy a recuperar años perdidos y nunca voy a volver a lo que se tuvo alguna vez; quizás es tiempo de darme cuenta que he crecido y ver que a lo que me he negado por siempre es ahora lo que busco; sí, también dentro de mí, pero esta vez no en un pasado, sino en un futuro.

Y espero que si la magia persiste, esa niña con la que sueño y la que pienso ahora; la que quiero, esté conmigo pronto y me devuelva lo perdido, pero de una forma renovada y así compartir este día como tantos otros y en la noche ver las estrellas tomadas de la mano y contarle cuentos, para despertar y verla jugar, como me veo a mi.. todavía.

Espero que no sea tarde para un deseo…Deseo que esa niña, juguetona, inteligente y bellísma aparezca pronto en nuestras vidas. Como nosotros estamos ya unidos. Ya la adoro. Y ya la esperamos.fl225madre-e-hijo-posters


Agridulce

noviembre 12, 2008

No es lo dulce que deja un recuerdo, ni lo amargo en lo que se transformó al paso del tiempo. Es la conjunción de esos dos sabores con muchos años ya recorridos por un viejo y mal conocido, como también el mal conducido camino…

Decadencia, perdición, enajenación, engaño, despotismo y falta de respeto en una guerra contra lágrimas de perdón, adolescencia, cenas a la luz de las velas y promesas…

¿Qué hacer?

Sólo no querer volver a él, a ese, el pasado, el que deja un sabor en la boca que no me gusta, que enfada, que se vuelca en una indigestión con sólo tragar un beso de lo que no existió, una prueba de que sí, sigo siendo la misma que hace diez años, sigo siendo la misma que no te quiso y sigo siendo la misma que te rechaza…

No me conoces, nunca me conociste, más que en canciones que yo misma te dediqué, los años pasaron y en ese laberinto sin salida te has quedado, hundido, sin poder salir… cambiaste sólo en ti, sacando lo que siempre vi, ser vil, rencor, y audacia que no has tenido con nadie más.

Una botella como muchas más se vaciaron, como tú mismo has quedado sin mi… puesto que no me has podido olvidar y lo sabemos, nunca podrás.

Un juego, que tonto al quererme así, cuando no veías lo que había de mí hacia ti…

Pobre de ella, de la engañada, de aquella con la que estarás o estás y que siempre sabrá de mí, y de tu hastío por ella, de quien quieres huir, pero no puedes escapar, una cobardía y sí, agridulce para mi, quizá; y para tí…algo amargo y sin una salida final.

Akelarre

noviembre 2, 2008

El caldero hervía, sangre y corazones dentro había; mientras el vapor con la niebla que salía de entre los árboles las envolvía.

Bailaban desnudas en un círculo, eran no más que mujeres, todas de una belleza inimaginable… Siempre lujuriosas, odiadas, y unidas por un mismo fin; el aire hacía que sus cabellos se giraran conforme sus pies  descalzos avanzaban, y en ese bosque ellas mismas profanaban.

No hacían más que sacrificios (quizás humanos) para obtener lo que querían,  pócimas con olor a rosas, venenos y sangre infectada que usaban cuando mataban a hombres porque ellos no las respetaban o se burlaban; cuando ellos incluso ni siquiera las miraban.

El olor a sexo se desprendía del sudor que emanaban, esas feromonas con las que cautivaban por el día, para así salir en busca de alguien; tras una noche de otoño, que era en la que se encontraban… sin incluso hacer acto (preciso) alguno, ellas por las noches volaban y en forma de súcubos a sus amantes atormentaban.

Lastimándolos, tomando lo que de ellos querían, así ellas por los domingos  aquellos se juntaban y en estas fechas llamaban  a sus ancestros, a quienes del infiero clamaban, para así satisfacer sus deseos… cuando ya oscurecía y en ese bosque no se veía más nada,  aunque se buscaran ya sólo se escuchaban las pisadas que en esas hojas secas se daban.

Hoy

octubre 21, 2008

Desperté dos veces, una para darme cuenta de que estaba sufriendo y cómo me dolía.

Otra para darme cuenta de la realidad, cruel sucia y bastarda realidad.

Cuando pensé que no pensaba… la mente racional vino a mí y dije algo que quizás no tendría que haber dicho… mis huesos están adoloridos y no me puedo mover, el estómago no es un órgano, es una masa de tejidos sangrando, sólo eso.

Me quebré de nuevo, me quebraron, una, dos, tres, cuatro veces y más… me perdí en un abismo de oscuridad y ahora no tengo nada… quedé en dónde no me puedo mover y enferma, ocultándome de los demás… callando mi dolor en gritos de desesperación, refugiándome en libros, en cuentos y en leyendas.

Me dijeron poeta… me dijeron amor, me prometieron y yo creí, caí en una vil trampa… la peor, la de los sueños… volar para después caer.

No hablo de un amor, como lo podrían considerar la mayoría, no hablo sólo de un hombre, hablo de mí y de lo que aprendí, de lo que quiero y en lo que me esmero…

Nunca vi que esa rosa tan bella estaba llena de espinas… me cegué y mis manos apenas y pueden escribir… no tengo voz y en la noche, como en el día, todo es gris, oscuro y se está con soledad… con recuerdos.

Con voces que no tienen nombre, con castillos sin pilares, con fuentes secas, con angustias y congojas… con dolor y amor que nadie acepta…

Fuerza incalculable que pasas ante mí, déjame, déjame en paz y ya no me tortures… sí, desata mis cadenas… no soy tu esposa ni mucho menos tu esclava…

Devuélveme a mi mundo y no me dejes en este… en la realidad que me lastima tanto, envuélveme y dame consuelo, mata a quienes me han hecho daño, tortúralos, dáñalos, que yo, sólo he hecho una sola cosa para que me odien…

Ser yo misma y no alguien de los demás…

Cronos a ti te hablo y sé que me escuchas…se benévolo conmigo y malo con ellos… despójalos de lo que tienen y dales dolores interminables y a mi, llévame a un descanso… no una tregua, déjame en la oscuridad y el frío, con tu aliento guíame y llévame a dónde quiero estar… no me dejes en este podrido y asqueroso lugar, dónde las alimañas carcomen ya mis restos, mientras enterrada en vida ya me encuentro… cierra mis ojos y haz que como hoy despierte, una vez más, en mi mundo, no en este, con rencor y hastío… sólo pensando en el «qué será»…

Dame otra, otra oportunidad…

Mi Príncipe

septiembre 29, 2008

El Príncipe que no existió más que en un cuento, aquel que de caballero ya reinó su propio imperio. Del que quiero escapar, más no puedo.

-Déjadme, Déjadme en paz…

Yo te digo… más no haces sino reírte como aquellos, los que estaban antes y después de alguien como tú. Esos los enmascarados, los falsos príncipes que no llegaron más que a papel en su trágico arrebatar.

Ya no te quiero! no, no puede ser… más te siento cada vez más profundo y tu sonrisa titirita como un cascabel; ahora son tus propias palabras las que me han herido…las que han sido como una estocada, la final, sin que escucharas si una, ni una sola palabra de las que he dicho en nuestro funeral.

Me escondo para no verte y en cualquier lugar, en una copa o en una canción te encuentro, incluso si hay sol… y no, ya no me divierto, en las noches no me dejas de buscar, persigues mi andar y yo, sigo queriendo escapar, más no lo consigo.

Este es mi pago por cada cual, por la enseñanza en contrapuntos y similares al andar, un reino abandonado ya al azar, siendo no más que recuerdos, quizás del más allá, de lo que nunca tuvimos, más de lo que siempre vivimos.

Que veo hoy, NUNCA fue real.

El Príncipe se quedó en un libro y su amante por igual, mas yo ahora lo escribo, siendo que no, no puedo, aunque quisiera no te puedo olvidar.

Pero el tiempo seguirá su curso y viendo que no estamos, tal vez algún día, entre leguas de fuego seremos consumidos y nos amaremos quizás más.

Escrito desde hace mucho tiempo,

tanto que no recuerdo cuando fue…

Resurgir

septiembre 22, 2008

«Desde el fuego extinto para quemar como el Hielo.»

BWO

No como los Demás

septiembre 5, 2008

Tú nunca me quisiste dar la luna plateada envuelta en terciopelo rojo, sin embargo la compartimos y aunque suene a un pasado habla más de un presente, como de una noche que se confunde con muchas, en las que apenas he despertado y tú te has ido, en las que te he esperado y nunca has llegado, en las que me fui de tu lado y en todas, todas en las que te he extrañado.

Hoy entra la lluvia tempestuosa sin pudor por mi ventana, irradiando temor, como dolor, esta noche he salido y he visto el cielo teñido de lágrimas de sangre, de esas a las que muchos llaman estrellas, las que queman con su abrasante frío… y Júpiter me miraba, como tú, Fugitivo me soñabas, como en la distancia de tierras lejanas me pensabas.

Esta noche en la que despierto y en la que, aunque quisiste no me has podido ver dormir… mientras mis manos te buscaban por la cama y mis labios añoraban tus caricias, yo, así mismo, como con una lágrima o un beso, así, así mismo, yo, te sentía en mis entrañas.

Nunca me diste la luna, ni me bajaste un racimo de estrellas, nunca me hiciste más daño del que yo misma me hice, del que nos hice… del que te hice y ahora sin verte, cegada por tu propio resplandor sólo te siento, en mí, dentro mío, y sé lo que es un laberinto de pasión, de odio, de lujuria, de tormentoso amor…

La lluvia me recuerda a ti, es como una danza, entre la que nos fundimos, como, las gotas de agua que colapsan, igual nuestros cuerpos al bailar entre sábanas blancas y mantos dorados que son llevados al suelo frío, mientras esas cortinas se levantan y demuestran un cuerpo en forma de dos, un silencio transformado en gritos por pasión.

Tu cuerpo me da reposo, en tu espalda me refugio, mientras mis dedos traviesos entran por tu cabello, desde tu cuello hasta tus sienes, mientras hundes tu cabeza en mi pecho y te pierdes en sombras que desdibujan mi aliento y formas de color con sabor a mi perfume…envueltos en un halo de humo, de ese incienso árabe…

Y es hoy cuando por primera vez me has dado la luna y la he tenido entre mis manos; la has envuelto tan bien que no la pude ver y tú de nuevo, tuviste que partir, mientras lo que yo quería era reír, sin embargo las lágrimas como la lluvia inundaron mi espacio y se confundieron en mi rostro.

Ahora sólo veo entre las sábanas dos figuras de cuerpos, envueltos uno en el otro, mientras estoy de pie, en una oscuridad y tú, tú no estás.

De qué vale la luna

– Me Pregunto o Me Preguntarás-

Para mí de nada sino estás… lo sabes.

Como sabes mis mentiras y mis deseos ocultos, como la noche, oscura y misteriosa, tejedora de encantos, poseedora de hechizos.

Tú mi amante de noche y luna, YO, tu mujer oscura y fría…

Combatientes por lo que queremos, encarnizados hasta perdernos, muertos en nuestra vida, tejedora de recuerdos transparentes…

TÚ Y YO

¿Cuál es la diferencia?

No somos como los demás…

Soliloquios

septiembre 4, 2008

TE AMO


y no se qué hacer contigo... mucho menos conmigo.

TE ODIO

Still Rains

septiembre 3, 2008

La lluvia no moja

No moja más que mis lágrimas

Al ver el pasado.

Miro el reflejo de un suspiro

Siendo atravesado por el dolor

Y apagando el fuego

El único que podría haber a mi alrededor.

La lluvia persiste al igual que las caras tristes

No hay cambio, aunque parezca que lo había.

Son círculos entre los que nos enredamos

Sin saber ni siquiera

Por dónde o

Cuándo entramos…

Ahora en un bosque te veo

Te recuerdo como parte de lo que fui.

Y empapados corriendo tras de lo que

No se podrá conseguir.

Y  tú ante mi mirada

Como con mis palabras crueles y ya insanas

Sólo atinas a decir:

Cómo quisiera que estuvieras aquí.

Wish You Were Here – Pink Floyd

No más perdón

agosto 29, 2008

Me encuentro en esta profundidad de la oscuridad y lúgubre noche leyendo antiguas cartas, de amor, de desapego, de dolor…. De un pasado que es sólo eso, un pasado que no tiene más ya ningún presente…

Pero me sigue haciendo sufrir.

-¿Por qué me atormento así? No lo sé en realidad.

Mientras el aire tibio del verano hacía volar mis rizos, una luz me hizo virar y lo que pensé que era un farol, resultó ser alguien que me sigue, alguien que no quisiera ver más en realidad.

La observé y ella, quizás con su magnetismo me hizo llegar a ese rincón y oculta de todo a mi alrededor, con luces que con su calor me quemaban, las leí y por un instante, de repente… pensé que viví, más cuando las lágrimas me hicieron cegar mi ya nublada vista, vi con gran resentimiento y angustia la verdad.

Todo había pasado y la luna ya no nos pertenecía, como alguna vez quisimos creer o como alguna vez fue.

Recuerdo la última carta que le escribí, y las pinturas que sólo yo miré, recordé que era un error, pero ahora puedo decir con claridad, certeza y dolor que ya pasó y que no volveré a pedir perdón.

13 de agosto… en mi mente y corazón hace mucho más.


Our Farewell – Within Temptation Ft Tarja (Nightwish)