Una Rosa

noviembre 30, 2007

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Una Rosa Meditativa, una rosa que está en el cielo de una pareja en el desolado desierto….

¿Qué significa?

Me dijeron alguna vez, esa rosa me trae recuerdos, muchos recuerdos y sólo algunas mujeres son dignas de recibirla como un regalo… 

De Neruda

noviembre 30, 2007

Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
Déjame que me calle con el silencio tuyo.
.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
 
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

Es Suzanne?

noviembre 30, 2007

Suzanne takes you down to her place near the river
You can hear the boats go by
You can spend the night beside her
And you know that she’s half crazy
But that’s why you want to be there
And she feeds you tea and oranges
That come all the way from China
And just when you mean to tell her
That you have no love to give her
Then she gets you on her wavelength
And she lets the river answer
That you’ve always been her lover
And you want to travel with her
And you want to travel blind
And you know that she will trust you
For you’ve touched her perfect body with your mind.
And Jesus was a sailor
When he walked upon the water
And he spent a long time watching
From his lonely wooden tower
And when he knew for certain
Only drowning men could see him
He said «All men will be sailors then
Until the sea shall free them»
But he himself was broken
Long before the sky would open
Forsaken, almost human
He sank beneath your wisdom like a stone
And you want to travel with him
And you want to travel blind
And you think maybe you’ll trust him
For he’s touched your perfect body with his mind.

Now Suzanne takes your hand
And she leads you to the river
She is wearing rags and feathers
From Salvation Army counters
And the sun pours down like honey
On our lady of the harbour
And she shows you where to look
Among the garbage and the flowers
There are heroes in the seaweed
There are children in the morning
They are leaning out for love
And they will lean that way forever
While Suzanne holds the mirror
And you want to travel with her
And you want to travel blind
And you know that you can trust her
For she’s touched your perfect body with her mind.

Sin título

noviembre 27, 2007

Los días son grises, la lluvia es triste, los días son noches y cada vez más cerca la fecha que esperara que nunca llegara, la propia ausencia presente, qué grato fuera que estuvieras a mi lado para así tener nuestra completa imperfección, perdidos en nosotros mismos, yo en tu mirada, en ti mismo y tú en mi esencia que ha reemplazado ya a tu sangre.

Te extraño, te extraño tanto que la extrañez es tan indiferente a lo que siento…. y lo único que me hace estar de pie… por momentos… son esos recuerdos, tu imagen, tu perfume, tus besos, tus caricias, con esas manos que me han encantando por su letra, por su sentir, por esos dedos que me provocan ese éxtasis al escribir.

Hoy en este amanecer que en realidad no sé si lo es, me encuentro, pensándote, necesitándote, y aclarándome; porque todo parece igual…las gotas de lluvia caen y los libros siguen en el mismo lugar, porque cerré los ojos en un iluso creer que podría dormir, sin embargo sólo fue un parpadeo y aquí sigo, en mi cama una y otra vez volteando hacia esa ventana que es mi prisión que no me deja salir a volar, que no me permite tantas veces respirar, porque ahora me he confundido, y no sé si pueda salir a que la lluvia moje mi rostro, me siento atrapada en mi misma y los pedazos que quedaron los sigo buscando, pero lo que tengo ya no lo quiero romper ni perder.

Sí, lo sé soy una contradicción, un encanto y un rechazo a la vez, estoy dividida no en dos, tal vez en tres… no puedo discernir entre pensamientos y sentimientos, pero si estoy segura de algo…te quiero y te quiero a mi lado, como tantas ocasiones, quiero que tú seas mi felicidad, que tú seas mi razón para ya dejar de llorar, quiero que tú seas quien me defienda de esos demonios, estar tranquila y así dormir de nuevo entre tus brazos, bajo el clima frío de un casi diciembre, pero entre el calor de nuestros cuerpos.

Simplemente te necesito, me haces falta. Ya no rechazaré la no soledad ante la presencia etérea de ti…ante mí.

Más Espirales

noviembre 27, 2007

El vacío cada vez consumía más y más, en realidad las lágrimas me estaban secando, por dentro e inundándome por fuera.

Mi mente parecía por lo menos para mi, aunque en realidad no creía que así fuera, solo me sentía algo más «lúcida» en realidad ya volvía a escribir, ya podía leer, pero no podía salir, seguía hundiéndome de nuevo en esas espirales, de momento los mareos estaban presentes y cerrando los ojos ante un grito despavorido vi un torbellino, cual si fueran aspas de un molino a punto de sesgar con unos filos que significarían la muerte y me jalaban con tal fuerza, tanta como la gravedad hacia un abismo en una forma horizontal… esas aspas que eran grises y de un metal frío y duro, el fondo era negro.

Me tenían de nuevo atrapada y yo, no podía hacer nada más que tratar de moverme en ese espacio que era ingrávido, pero en realidad no me veía, sólo sentía el caer, el llamado hacia esa espiral ahora deformada que significó un desmayo.

Cuando desperté sólo tuve odio y coraje y vi las paredes blancas llenas de manchas, de manchas que escurrían, un líquido rojo y viscoso que en realidad era sangre, era mi sangre y el sufrimiento de haber sido cortada por el filo de un tipo de espiral que ahora ya me estaba consumiendo.

Y casi terminó conmigo.

Un Despertar

noviembre 27, 2007

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Desperté dentro de la oscuridad, el frío era poco, pero se sentía tan bien, yo estando bajo esas frazadas que calentaban mi piel, desnuda dentro de sábanas y rodeada por almohadas.

El olor, un olor delicioso fue el que hizo moverme… ese humo proveniente de un incienso de rosas rojas…me movía tanto hasta que por fin abrí los ojos y escuché tras la ventana como la lluvia caía gota por gota de una manera que parecía que tuvieran un peso tan profundo desgastante que las atormentaba y sólo querían caer, para así salir de esas nubes cerradas en un cielo abrumado por lluvia que pareciera un llanto casi estallante, las gotas de lluvia querían caer ante el asfalto gris, sucio y frío. Era lo único que buscaban.

 

 

De nuevo el tiempo pasaba y pasaba, se escuchaban los «tic tacs» de aquellas manecillas pertenecientes a ese reloj tan inexistente que sólo yo veía y conocía el sonido del pasar del mismo. De nuevo con los ojos cerrados y boca abajo entre mis almohadas y cojines, sólo daba vueltas entre las sábanas, queriendo que se detuviera, porque era como un martirio que esto siguiera y esos sonidos en mi cabeza eran intolerables, todo, excepto el frío y la lluvia que hacían calmar si no mis nervios, por lo menos mi angustia.

 

La lluvia y los días grises me ponían feliz o por lo menos eso creía, era una sensación muy placentera. Así lo sentía, eso me reconfortaba como las lágrimas escondidas entre las almohadas que se parecían a las gotas de lluvia cayendo en el vacío de una ciudad perdida. Una ciudad ensoñada y triste, llena de lágrimas, gris y con un olor a rosas…

 

Y con eso me quedo, esa sensación tan placentera que me vuelca hacia el esperado sueño tantas veces reclamado un sueño nuevamente, hacia una lluvia gris, un piso de asfalto frío, sucio, de tantas ciudades, que tan solo son una ensoñación, esos días nublados y grises que hacen que cierre mis ojos envuelta en una atmósfera de humo con olor a rosas rojas y es así como vuelvo a mi sueño, a mi eterno sueño para escapar de la realidad.

 

El Arbol Encantado

noviembre 26, 2007

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Era un árbol, en realidad no sabía la especie a la que pertenecía, pero se encontraba en los bosques de temperatura templada casi fría, en el norte de Europa.

No podía aceptar que era un árbol y el no poder moverse, siempre quería más y más, no aceptaba lo que había a su alrededor y por eso se atormentaba. Pareciera una mujer -muchos pensaban al verle caminando por esos bosques- el estar junto a su tronco y el sonido de sus hojas moviéndose al compás del viento daban mucha paz y tranquilidad a quien estaba a su lado, sin embargo, ella sólo quería salir de ese tronco.

En realidad la habían transformado en eso, en un pedazo de madera, con vida, mucha vida, pero no podía hablar y estaba indefensa ante la tortura de los incendios y de lo lastimoso de las heridas que le provocaban los humanos, esas hachas que con el tiempo se fueron convirtiendo en serruchos y después en sierras, y cómo la querían convertir en algo que en realidad ella nunca fue, ella nunca quiso ser.

Antes mucho antes de que esto sucediera ella misma había cambiado por muchos hechizos y maldiciones y su forma había sido distorsionada y hasta la fecha no se sabe cómo fue…

Sólo pensaba, mi cabello ahora ya no será rubio ni tampoco negro como en otras ocasiones, ahora será natural, como lo que me rodea, este hermoso bosque -se decía- será color madera, y yo yo seré fuerte, con mucha vida, aunque muy vulnerable, dando mucha vida a través de los frutos que son las mismas letras, pero seguiré seca, mi piel y mi ser estarán secos a pesar de tener vida.

Tenía mucho miedo cuando llegaban los leñadores porque no quería saber más de dolor y no poder hacer nada, era una tortura casi indescriptible, hasta los niños le daban un miedo enorme ya que con sus navajas ponían iniciales y rasgaban su propia piel que para los demás era solo la corteza seca de un árbol viejo, antiguo…

Sin embargo, sabía y estaba con una completa seguridad de que era parte de una sublime naturaleza y por eso había tantos al acecho, la querían cortar, destrozar y convertirla en algo más, en algo que para ella, antes era parte de su vida, hojas de papel, hojas en las que antes escribía, hojas en las que plasmaba sus historias, su mente, y su vida, su vida por completo, pero hacía tanto tiempo de aquello que parecían sueños aunque ella ni siquiera los podía recordar ya que siempre estaba «despierta» por el propio miedo, angustia, que le provocaba el contacto con la gente en su propio ambiente que no toleraba que lo inundaran con desechos, como en muchas otras ocasiones.

Tenía la apariencia propia de un Roble, fuerte, robusto y muy apreciado por toda la humanidad, uno de los más conocidos en el mundo entero, en todas las épocas, en todos los ambientes o géneros, siempre se hablaban de árboles y de la importancia de la naturaleza y ella lo sabía, porque estaba llena de hojas, en su interior lo único que habían eran libros desde manuscritos hasta libros que habían hecho con retazos de sus compañeros del bosque, ella los guardaba en su interior y aún estando estática (menos cuando el aire movía su copa) siempre estaba enterada de lo que pasba en el mundo «exterior».

Su copa era de las más frondosas, estaba llena de ramas y hojas, tan pero tan llena que apenas y dejaba pasar los rayos del sol a través de esas hojas y eso hacía tan apacible a quienes caminaban por ese bosque para sentarse y recostarse en su tronco y sentir tal paz y tal tranquilidad, como a la vez el ánimo para continuar con su viaje.

Amante de las tormentas cuando en realidad era la Princesa… ahora llevaba más maldiciones, no sólo ser alguien inmóvil sino atraer a esos rayos provenientes de las tormentas que tanto amaba, que tanto adoraba, ahora esos rayos también tenían una maldición porque al ser sus eternos amantes, sus eternos pretendientes, no la quisieron dejar sola en ese tormento y decidieron sacrificarse por amor a ella, pero no se dieron cuenta, de que esa maldición los convertiría en rayos.

Y así fue como atraía a esos truenos, a esos rayos, que en realidad eran los hombres que había dejado en su vida, pero que sin embargo la seguían sin darse cuenta que en realidad eran su propia destrucción, porque bien se sabe que los árboles atraen a los rayos y sólo para una cosa… para acabar con ellos, para ser su fin, para en realidad hacerlos sufrir más a través de una muerte que se consume en fuego y termina en cenizas.

Una atracción ante la que no se puede hacer nada.

Luna Llena

noviembre 25, 2007

Hoy es noche de luna llena y tantas noches en vela, asomada por esa ventana esperando su llegada… hasta que por fin.. ha llegado y no era lo que pensaba, no era lo que imaginaba o mucho peor no era lo que esperaba, hoy la luna no me llena, hoy la luna para mí no es nada, hoy la luna no está llena, para mí está vacía.

Llena, llena… esa palabra puede significar tantas cosas, tantas emociones, tantos sentires, tantos recuerdos, pero ¿como llenar algo?, si en realidad sólo hay fragmentos, y sigo encontrándolos ya que son las sorpresas que te llevas al estar rota, encontrar esos pequeños pedazos de una persona que ahora no se ve, no se siente, no se encuentra y ni siquiera es iluminada por esa luz blanca y resplandeciente en medio de la noche, esa luz que en realidad es sólo un reflejo del sol que está oculto tras de ella, descansando, en su eterno reposo, la noche, la oscuridad.

En realidad, esto se está convirtiendo en un eclipse, o ¿así fue desde siempre? No lo sé, por el momento ya no quiero pensar más, no quiero ver la luna, no quiero luz, no quiero la belleza, no quiero la noche, no quiero el sol, no quiero la oscuridad…

Sólo me quiero a mí…. es lo que necesito.

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La Locura….

noviembre 24, 2007

 

Y diga lo que quiera de mí, el común de los mortales, pues no ignoro cuán mal hablan de la Estulticia, incluso los más estultos, soy, empero, aquella, y precisamente la única, que tiene poder para divertir a los dioses y a los hombres cuando quiero.

Y de ello es prueba poderosa, y lo representa bien, el que apenas he comparecido, ante esta copiosa reunión, para dirigiros la palabra, todos los semblantes han reflejado de súbito, nueva e insólita alegría, los entrecejos se han desarrugado y habeís aplaudido con carcajadas alegres y cordiales, por modo que, en verdad, todos los presentes me parecéis ebrios de néctar no exento de nepente, como los dioses homéricos, mientras antes, estabais sentados con cara triste y apurada, como recién salidos, del antro de Trofonio.

Habló la Estulticia

La Vida…

noviembre 24, 2007

Yo sueño que estoy aquí
destas prisiones cargado,
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño:
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.

Calderón de la Barca